La Línea XYZ
Date Created: 1938
Type: Photographs
Extent: 1 item
Geographic Region: Almenara, Spain
39.75212, -0.22513
Entre el 23 de abril y el 25 de julio de 1938 se desarrolló una de las batallas más olvidadas de la Guerra Civil: la ofensiva franquista contra Valencia. Esta batalla fue una continuación de la gran ofensiva en Aragón que acabó partiendo el territorio republicano en dos al alcanzar las tropas rebeldes la costa mediterránea. Con Cataluña al alcance de su mano, Franco tomó la muy cuestionada decisión de avanzar hacia el sur en un intento de tomar Valencia. Quizás pensaba que se iba a repetir la dinámica de la batalla anterior, en la que los franquistas progresaban rápidamente y los republicanos se desmoronaban. La ofensiva consiguió tomar toda la provincia de Castellón, pero no pudo alcanzar el objetivo último pues se estrelló contra una muy exitosa defensa de las tropas leales a unos cincuenta kilómetros de Valencia: la línea XYZ.
Después de la derrota en Aragón, el ejército republicano consiguió rearmarse lo suficiente como para poder hacer frente al enemigo. En especial, llegaron nuevos aviones y armas antiaéreas, que paliaron la ventaja en aviación que gozaban los franquistas desde mediados de 1937. Al mismo tiempo los ingenieros republicanos se pusieron a construir la línea defensiva XYZ en las sierras al norte de Valencia. Esta estaba compuesta por unas trincheras muy bien excavadas y fortificadas que aprovechaban los pliegues del terreno. Estas trincheras se mostrarían muy difíciles de tomar y muy resistentes a los bombardeos. Contra estas fortificaciones se lanzaron los rebeldes cuando reanudaron su ofensiva el 5 de julio. Esta se basó en un gran apoyo aéreo y artillero a los asaltos frontales de la infantería. Los asaltos fueron rechazados por los defensores con graves pérdidas para los atacantes (unas 5.000 y 20.000 bajas respectivamente). A partir del 24 de julio los ataques rebeldes fueron haciéndose más escasos hasta desaparecer. Fue una gran victoria defensiva republicana que el franquismo decidió olvidar.
La ofensiva contra Valencia estuvo acompañada por una oleada masiva de bombardeos contra poblaciones costeras de Cataluña y Valencia, en los que una vez más los italianos se distinguieron por sus ataques indiscriminados. El 25 de mayo sus bombas cayeron sobre el mercado central de Alicante donde dejaron unos 300 muertos. El 31 de mayo le tocó el turno a Granollers, donde mataron a más de 200 personas. Por su parte, la Legión Cóndor, utilizando como base Mallorca, bombardeó varios puertos, destacando por su letalidad los ataques a Alicante y Cartagena. Barcelona fue otra vez bombardeada de forma repetida. Estos ataques causaron una gran indignación internacional, pero, como tantas atrocidades previas, no tuvieron ninguna influencia en la política de No Intervención de las democracias.
El fracaso de la ofensiva de Levante permitió a la República rehacer sus ejércitos en Cataluña. Allí estaban algunas de sus mejores unidades que ahora pudieron ser rearmadas. Pero faltaban soldados, por lo que las autoridades empezaron a llamar a filas adolescentes, a los que se conoció popularmente como la Quinta del Biberón. Pronto todos ellos lucharán en la batalla más larga, sangrienta y decisiva de toda la guerra en las orillas del río Ebro.