Valle de los Caídos

Esta fografía muestra la explanada de la Basilica del Valle de los caidos donde estuvo enterrado el dictador Francisco Franco. Este monumento controvertido fue construído para honrar los que lucharon y murieron en la nacional. Los muertos del bando franquista constituyeron un elemento importante del horizonte memorial de la dictadura. Glorificados mediante un discurso que mezclaba elementos de heroísmo militar y cruzada católica, sus apoteosis de recuerdo es el Valle de los Caídos, en que Franco en persona explotó el primer cartucho de dinamita que empezaba la obra el 1 de abril de 1940. Para su construcción, la dictadura empleó un número sustancial de prisioneros políticos. Fue inaugurado el 1 de abril de 1959, el veinte aniversario de la victoria franquista en la guerra, poco después de que José Antonio Primo de Rivera, el fundador de la Falange y víctima icónica de la Cruzada franquista, fuese enterrado cerca del altar de la basílica.

A pesar del hecho de que la documentación del Valle no manda de forma explícita que sea un lugar de entierro solo para los muertos del bando rebelde, es evidente que fue inicialmente concebido como un monumento para celebrar la victoria franquista. Que los republicanos acabasen ahí enterrados es un tema polémico, en parte porque de esta manera el régimen derrotó de nuevo y afrentó a los vencidos. Con su pasado ambiguo, el monumento del valle de los Caídos continúa siendo la fosa común más grande de España. Oficialmente hay 33.383 cuerpos enterrados allí. De ellos, 21.423 están identificados y 12.410 no. Puede haber entre 5.000 y 12.000 republicanos enterrados allí pero el alto número de cuerpos sin identificar hace muy difícil su cuantificación. Sus familias no compartían los valores que hay detrás de la construcción del monumento, pero fueron impotentes para evitar que esos cuerpos fuesen trasladados.

Cuando murió el 20 de noviembre de 1975, Francisco Franco fue enterrado, con los honores de Jefe del Estado, en el altar de la basílica, alejado apena unos metros de José Antonio Primo de Rivera. En 2011, una comisión de expertos encargada por el Gobierno del socialista  José Luis Rodríguez Zapatero para estudiar el futuro del complejo monumental recomendó que se cerrase por razones de seguridad. Después de unas obras, el Gobierno del Partido Popular de Mariano Rajoy lo reabrió. El 24 de octubre de 2019, por iniciativa del nuevo Gobierno socialista de Pedro Sánchez, los restos de Franco fueron sacados de la basílica y enterrados de nuevo en el panteón familiar en el cementerio de Mingorrubio, en las afueras de Madrid. El futuro del valle de los Caídos está aún por decidirse. Su re-significación como un cementerio civil forma parte de la propuesta de la Ley de Memoria Democrática de 2022. Se habla también de hacer un centro histórico interpretativo en el conjunto.