El juicio de László Rajk
Repository: Family archive of László Rajk and Judit Rajk
Source:
Creator: Unknown/desconocido
Date Created: 1949-09
Type: Photograph
Extent: 1 item
Geographic Region: Budapest, Hungary
47.48139, 19.14609
En esta foto se ve un momento del juicio de László Rajk en setiembre de 1949.
En los años cuarenta y cincuenta, cuando la mayoría de los voluntarios que volvieron a Hungría de la Guerra Civil española estaban todavía vivos, estos tenían miedo de hablar de sus experiencias porque el dictador comunista del país, Mátyás Rákosi, había comenzado una purga entre los miembros de la resistencia antifascista húngara. Se es acusaba, en línea con los procesos de Moscú, de trotskismo, que era considerado el mayor enemigo de la Unión Soviética. Aquellos que habían tomado parte en la Guerra Civil española fueron acusados de haber sido reclutados por los servicios secretos occidentales.
Uno de los más notorios de los llamados “Juicios Españoles” fue el de László Rajk y de otros exvoluntarios acusados en 1949 de trotskismo, espionaje y traición. Después de salir de España, muchos voluntarios continuaron su lucha contra los nazis en la resistencia francesa y belga o se unieron al ejército británico en África, pero se convirtieron en sospechosos en su país de origen por haberse “contaminado” por demasiadas influencias occidentales. Rajk, uno de los secretarios comunistas de la 13 Brigada fue herido en la Batalla del Ebro, fue enviado a un campo francés y desde 1941 se convirtió en uno de los organizadores de la resistencia antifascista en Hungría. Luego se convirtió en miembro del Comité Ejecutivo Central del Partido Comunista Húngaro y sirvió como Ministro del Interior y también de Asuntos Exteriores. Presidió los primeros juicios títere en Hungría y organizó las torturas brutales que sufrieron los prisioneros. Era el líder más popular entre la juventud del partido, la izquierda democrática y los intelectuales, y un comunista independiente de convicciones firmes. Para Rákosi, Rajk era el rival más peligroso.
La acusación contra Rajk afirmaba que había llegado a España como un agente del régimen derechista de Horthy para llevar a cabo actividades subversivas. Fue investigado, cesado en sus funciones oficiales y expulsado del partido. Fue acusado de haberse reunido con agentes yugoslavos de organizaciones de espionaje extranjeras en los campos franceses, de haber sido reclutado por la Gestapo para espiar en Hungría y de colocar a trotskistas, provocadores y espías, la mayoría de los cuales habían luchado en las Brigadas Internacionales, en puestos relevantes. Según los ficales, todos eran espías que habrían estado involucrados en una conspiración que había comenzado en los campos de batalla de España.
Sabiendo de las torturas que le esperaban (pues él las había diseñado previamente), Rajk confesó todo y de esta forma declaró colaboradores a los húngaros que habían participado en la Guerra Civil, o por lo menos sospechosos. Rajk fue condenado y ejecutado. En total fueron condenadas 155 personas, incluyendo 16 miembros prominentes de las Brigadas Internacionales. Los cientos de voluntarios húngaros que no fueron juzgados vivieron bajo sospecha hasta los años sesenta. Los condenados fueron rehabilitados en 1956, tres años después de la muerte de Stalin. Rajk fue re-enterrado en una ceremonia de Estado el 6 de octubre de 1956, en un evento que sería precursor de la revolución húngara que comenzó tres semanas después.