Guerra mediática
Repository: Biblioteca Valenciana Digital, Valencia, Spain
Creator: Vogel, Lucien, 1886-1954
Repository: Hermoteca
Source:
Reference Code
https://bivaldi.gva.es/va/catalogo_imagenes/grupo.do?path=1026441
Date Created: 1936-08-29
Type: Periodicals
Extent: 1 item
Geographic Region: Paris, France
48.8567, 2.35146
La Guerra Civil española fue la primera guerra mediática moderna, y esto contribuyó poderosamente a internacionalizar el conflicto entre el público mundial. Esta portada de la revista francesa Vu es un ejemplo.
Los gobiernos republicanos jugaron un papel relevante. Produjeron pósteres dirigidos específicamente al público británico y francés, entre ellos uno de los más famosos: Madrid, la práctica "militar" de los rebeldes: Si toleras esto, tus hijos serán los siguientes. Este poderoso póster jugaba con algo nuevo, el horror de los bombardeos aéreo de ciudades europeas yutxaponiendo una foto de un niño muerto con la de una escuadrilla de aviones. La Unidad de Cine de la Oficina de Propaganda de la Generalitat produjo versiones en inglés y francés de sus informes-reportajes semanales titulados España Hoy. Por su parte, los catalanistas conservadores contaban con la revista Occident editada en París por Joan Esterlich y financiada por el empresario catalán Francesc Cambó.
La prensa internacional siguió de cerca la guerra y varios periódicos extranjeros tenían corresponsales en España. Fue Mário Neves del Diario de Lisboa quien primero contó la masacre de Badajoz, mientras el del Times de Londres, George Steer, informó por primera vez al mundo del bombardeo de Guernica.
La fotografía jugó un papel crucial. Fotógrafos habían tomado imágenes de guerras desde la de Crimea en la década de 1850, pero la Guerra Civil fue la primera contienda en ser "cubierta" en el sentido moderno. Los recientes avances en tecnología fotográfica, como la cámara portátil Leica -con su lente rápida y capacidad para carretes de 36 fotos-, permitieron que fotógrafos como Gerda Taro, Robert Capa y David Seymour pudieran captar imágenes de gran realismo. La gran popularidad de las revistas fotográficas semanales, como Vu en Francia y LIFE en los Estados Unidos, permitió que sus fotos llegasen rápidamente a millones de espectadores en todo el mundo.
Millones más aprendieron sobre la Guerra Civil a través de los noticiarios. Había equipos de filmación de Gran Bretaña, Francia, Italia, Alemania, la Unión Soviética, Estados Unidos y otros países sobre el terreno en España. La propia Fox Movietone News desplegó quince equipos. Editados y con narración y música añadidos, los noticiarios fueron vistos por un público verdaderamente masivo, diecinueve millones de personas cada semana en el Reino Unido.
También hubo películas más largas. Algunas eran documentales, aunque la diferenciación con la propaganda fue siempre muy porosa. El director holandés Joris Ivens trabajó con varias importantes figuras estadounidenses, incluidos Ernest Hemingway, Orson Welles y Lilian Hellman, para producir la pro republicana Spanish Earth, que se estrenó en la Casa Blanca para el presidente Franklin Roosevelt en 1937. Por su parte, Henri Cartier Bresson realizó varios documentales, incluido el titulado With the Abraham Lincoln Brigade. En el lado nacionalista, en 1938, el estadounidense Russell Palmer hizo Defenders of the Faith, del que se ha dicho que contiene las primeras escenas de cualquier guerra en color.
Otras películas fueron dramas. La novela de André Malraux sobre aviadores republicanos se convirtió en L’Espoir. Sierra de Teruel, que se estrenó en julio de 1939. Hollywood hizo una serie de películas mientras la guerra aún estaba en marcha, incluida Blockade, protagonizada por Henry Fonda (1938). También hubo películas dramáticas pro-nacionalistas como Camaradas en el mar (1938), hecha en Alemania, y Sin novedad en el Alcázar, italiana, que ganó la Copa Mussolini en el Festival de Cine de Venecia de 1940.