Francia y la No-Intervención
Repository: Bibliothèque Municipale de Toulouse, Toulouse, France
Creator: Gouvernement municipal de la ville de Toulouse
Repository: Bulletin municipal de la ville de Toulouse
Source:
Reference Code
numérisation 66691/FRAC31555_PO1_1936-06
Date Created: 1936-06
Type: Photograph
Extent: 1 item
Geographic Region: Toulouse, France
43.60446, 1.44425
Léon Blum (1872-1950) era el presidente del gobierno del Frente Popular en Francia al estallar la Guerra Civil española. Su partido, el socialista SFIO, había ganado las elecciones del mes de mayo anterior, en coalición con los radicales y el Partido Comunista, formando un gabinete de coalición socialistas-radicales con el apoyo externo de los comunistas. A él se dirigió el Presidente del Gobierno español -que también salió de un Frente Popular-, José Giral, el 19 de julio de 1936, en demanda de ayuda urgente en la forma de suministros militares, lo que Blum aceptó inmediatamente, el día 21, tras consultar con los ministros de Asuntos Exteriores -Yvon Delbos- y de Guerra -Édouard Daladier-, ambos radicales, y con el del Partido Comunista. Aparte de la solidaridad democrática y antigolpista interesaba al país contar con un aliado en el sur en caso de una nueva guerra con Alemania y para asegurar la comunicación con las colonias francesas del Norte de África y la metrópoli.
Sin embargo, la decisión de Blum contó inmediatamente con el rechazo activo de otros radicales, de las fuerzas derechistas, de la jerarquía y parte de la opinión católicas y del ejército, que temían que la intervención en favor de la República Española contribuyese a provocar el estallido de una nueva guerra en Europa y más aún de que los episodios revolucionarios que se estaban desencadenando en la Zona Republicana acabasen influyendo en Francia. En medio de un clima de gran controversia pública y con el Presidente de la República Albert Lebrun en contra, Delbos y Daladier cambiaron de posición, dejando a Blum y los ministros socialistas en solitario y cambiando su posicionamiento en el Gobierno, tras un intenso debate, el 25 de julio. A ello contribuyeron destacadamente las presiones ejercidas por el premier británico Stanley Baldwin y el secretario del Foreign Office Anthony Eden, ambos del Partido Conservador, que desde el primer momentos se mostraron contrarios a conceder ayuda a la República por creer que sería contraproducente para la política de apaciguamiento que venían impusando frente a la Alemania nazi y la Italia fascista y temiendo por los intereses económicos británicos en España, que consideraban amenazados por las izquierdas revolucionarias.
El 1 de agosto el gobierno Blum propuso la firma por parte de los países europeos de un Pacto de No Intervención que prohibiera la venta de armas a cualesquiera de los contendientes. Gran Bretaña apoyó la propuesta y, a finales de agosto, veintisiete estados europeos -todos menos Suiza- lo suscribieron. El acuerdo no serviría para detener la guerra, pero daría cobertura a la negativa británica a ayudar a la República. Pero sobre todo sería reiteradamente incumplido por Alemania, Italia, la URSS y otros países, incluida en algunos momentos la propia Francia -como ocurrió durante la primavera de 1938-, y constituyendo una gran farsa que acabó contribuyendo a la victoria de Franco de 1939. Tras la derrota de Francia de 1940 Blum fue encarcelado por el gobierno colaboracionista de Vichy, juzgado y en 1943 entregado a los nazis por su condición de judío y dirigente izquierdista, que lo internaron en el campo de concentración de Buchenwald. Sobrevivió a su internamiento y presidiría un gobierno durante unos meses de 1946 y 1947.