Bala recibida por el Dr. Georges Henny (1907-1991), delegado del CICR en Madrid durante la Guerra Civil Española
Repository: Musée international de la Croix-Rouge et du Croissant-Rouge
Source:
Source: Musée international de la Croix-Rouge et du Croissant-Rouge. COL-1999-26-1.
Date Created: 1936-08-12
Type: Bullet
Extent: 1 item
40.4167, -3.70358
El 8 de diciembre de 1936 un avión de la embajada francesa fue derribado en el cielo de Madrid. A bordo, el gran reportero Louis Delaprée y el jefe de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja en la capital española, Georges Henny. El primero falleció tras ser trasladado al hospital de Guadalajara y el segundo, herido, logró abandonar el país unas semanas después.
Este trágico episodio es objeto de una controversia historiográfica. Algunos autores han acusado a la inteligencia soviética de estar detrás de este ataque. Según esta interpretación, el delegado pretendía transmitir al Consejo de la Sociedad de Naciones un informe sobre las masacres de Paracuellos del Jarama. En el contexto de la llegada de las tropas nacionalistas, alrededor de 2.300 presos fueron evacuados de las prisiones madrileñas y asesinados en dos localidades del extrarradio de la capital (Torrejón de Ardoz y Paracuellos) del 7 de noviembre al 4 de diciembre de 1936. El delegado había visitado Torrejón de Ardoz en compañía de los encargados de negocios de Noruega y Argentina, Félix Schlayer y Edgardo Pérez Quesada.
Esta bala es retirada de la pierna del delegado por Manuel Bastos Ansard en el Hotel Palace de Madrid, transformado en hospital militar. El tamaño y la masa del proyectil son compatibles con la munición utilizada por los cazas soviéticos.
Testigo de las masacres contra los prisioneros nacionalistas, ¿fue Henny el objetivo de los servicios secretos soviéticos? El testimonio de Andrés García Lacalle, primer piloto español de la escuadra soviética dirigida por Pável Rychagov, confirma la intervención de dos aviones soviéticos pilotados por Nikolay Shmelkov y Georgy Nefiodovitch Zakharov. Sin embargo, según García Lacalle, Zakharov, que se convertiría en una figura de la aviación soviética, habría disparado como reacción a los reflejos del sol en la cabina del avión.
Esta tesis ofrece una lectura más coherente que la del “ataque” soviético. En esta época, uno de los objetivos de la política del Frente Popular de la URSS era una alianza con Francia. Además, la víctima del atentado, Delaprée, había sido autor de varios artículos que contribuyeron a movilizar a la opinión pública contra los bombardeos de Madrid. Desde el punto de vista suizo, la denuncia de la violencia republicana por parte de un delegado ante la Sociedad de las Naciones contradice el funcionamiento del CICR. El CICR, institución privada, sigue una política muy prudente frente a los principales Estados. Además, el Comité depende de la política de la Confederación, marcada, durante la segunda mitad de los años 1930, por una retirada de los organismos internacionales.
Por otra parte, el avión francés probablemente llevaba listas de prisioneros ejecutados y planos de las posiciones del ejército republicano destinados al general Dávila, jefe del Estado Mayor del ejército del general Franco. Este episodio revela el compromiso del delegado con la protección de los prisioneros y refugiados nacionalistas, pero también su colaboración con los representantes diplomáticos que participan en la transmisión de información militar.
A su regreso a Ginebra, el delegado del CICR decidió poner fin a su colaboración con el CICR. A partir de entonces se dedicó a su profesión de médico.
SF