Memorias de puertorriqueños combatientes

Los periódicos puertorriqueños El Mundo y El Imparcial entrevistaron a algunos voluntarios que regresaron de la guerra civil. También publicaron relatos enviados desde el campo de batalla por otros puertorriqueños. Pocos años después de terminar la guerra, tres puertorriqueños publicaron sus memorias y experiencias de combate, testimonios muy valiosos por su cercana inmediatez a la contienda. 

El periodista y miliciano José Enamorado Cuesta envió a El Mundo desde el campo de batalla tres “Crónicas”, ofreciendo al lector puertorriqueño la oportunidad de conocer otro punto de vista que no fuera el relato pro-franquista predominante en la prensa. En sus crónicas (27 y 31 de agosto, y 31 de octubre de 1936) relató los sucesos de la insurrección militar en los cuarteles de Melilla y Madrid, los acontecimientos en la sierra de Guadarrama y su participación en la caída del Cuartel de la Montaña. 

Rubén Gotay Montalvo narró sus experiencias en Madrid y en las batallas de Jarama, Guadalajara, Brunete, Aragón y Teruel en el libro Mientras arde la hoguera. Apuntes de un corresponsal combatiente, publicado en 1939 que se ve aquí. Gotay era estudiante de Derecho en Madrid cuanto ocurrió la sublevación militar. Fue corresponsal combatiente en la 11 División del Ejército Popular de la República al mando de Enrique Líster. Regresó a Puerto Rico en agosto de 1938.

En 1942 el periodista Antonio Pacheco Padró publicó sus memorias de la guerra en Vengo del Jarama. Glorias y horrores de la guerra. Combatió con el batallón estadounidense Lincoln en la batalla del Jarama, donde fue herido en combate. Luego de recuperarse en Barcelona, se reincorporó como comisario político y oficial de enlace del estado mayor de la 46 División, al mando de Valentín González, El Campesino. La narración de su participación en la batalla del Jarama es extraordinaria, atinada y valiosa por su crudeza y veracidad. Regresó a Nueva York en septiembre de 1937.

En 1945 el poeta y periodista Emilio R. Delgado publicó en la revista Florete de Puerto Rico la aventura de su huida de España hacia Francia bajo el título “Como me evadí de la España franquista”. Delgado residía en Madrid cuando ocurrió la sublevación militar. Fue corresponsal de guerra, redactor y jefe de los periódicos republicanos Ahora, Nuestra Bandera y Mundo Obrero. Durante los días previos a la caída de Madrid defendió, con fusil en mano, las instalaciones de Mundo Obrero. Amenazado de muerte y buscado por toda España, huyó de Madrid, pero fue arrestado por los falangistas en Alicante. Logró escapar, cruzar a Francia y llegar eventualmente a Nueva York.

JAOC/TTR