Cripta Mausoleo, Bilbao
Repository: Colección particular Mikel Urquijo
Date Created: 1938-09-25
Type: Monuments
Extent: 1 item
43.263, -2.935
Esta Cripta Mausoleo fue construida inicialmente como enterramiento para las personas asesinadas en los asaltos a los barcos prisión y cárceles de Bilbao en los años 1936 y 1937.
La memoria de la Guerra Civil, y especialmente de los muertos en la guerra, fue un elemento central en la fundamentación ideológica del régimen franquista. Las autoridades tomaron el 18 de julio como hito fundamental de la “Nueva España”. A la vez que se recordaba a unas víctimas del conflicto, se silenciaba e ignoraba la memoria de los muertos del bando republicano. Estos muertos no existían.
La generación de esta memoria de la guerra se expresa en la creación de monumentos, en el cambio de las denominaciones del callejero, en el nombre de colegios, hospitales u otros edificios públicos o en el calendario festivo-conmemorativo.
Sin esperar al final de la guerra las nuevas autoridades franquistas comienzan la creación de monumentos para recordar a “los que prestaron a Dios y a la Patria el servicio de sus vidas”. Toda España se fue llenando de lugares de memoria para recordar a los “caídos por Dios y por España”, junto a otras construcciones que homenajeaban a la Victoria. En el caso vasco destacan los monumentos a los “mártires”, víctimas civiles de la represión, por encima de los muertos en combate.
Tras los bombardeos de la aviación franquista sobre Bilbao en 1936 y 1937 se produjeron varios asaltos a las prisiones de la Villa por personas armadas que asesinaron a más de 300 prisioneros de ideología derechista, entre las que estaban destacados líderes políticos y miembros de la élite social y económica vasca.
Quince días después de la conquista de Bilbao por el ejército sublevado, el nuevo Ayuntamiento acordó la construcción de este monumento para honrar a "los que prestaron a Dios y a la Patria el servicio de sus vidas, a los mártires de los innumerables asesinatos que se han perpetrado para amargura de nuestro pueblo". Para ello se proponía reunir "en un Mausoleo, que se erigirá en el Camposanto de Derio, los cuerpos de todos aquellos que han sido asesinados durante el dominio rojo-separatista". El 25 de septiembre de 1938 fue inaugurado el Mausoleo con la presencia del ministro de Industria y el Ayuntamiento acordó que los días 25 de septiembre y 4 de enero se celebrasen misas, con presencia de la Corporación, "por la salvación de las almas de los mártires”. Durante toda la dictadura el Ayuntamiento celebraba una misa anual en la Cripta Mausoleo del Cementerio y otra misa de réquiem en la Catedral en memoria de los “mártires”.
En el periodo democrático el Ayuntamiento no celebra estas misas y ha suprimido las inscripciones del Mausoleo, pero se ha mantenido la construcción como tal.
MU/ UB/ MJV